Tiken Jah Fakoly
Compromiso y amor puros por África
Cantante comprometido donde los haya, Tiken Jah Fakoly, alias Doumbia Moussa se ha erigido como la gran figura emergente del reggae africano, siguiendo la estela de su compatriota Alpha Blondy.
Tiken Jah Fakoly es ante todo un cantante comprometido con su continente. Nunca se ha cortado a la hora de denunciar los abusos de los políticos y las manipulaciones de las multinacionales en África, y particularmente en su país Costa de Marfil, que ha vivido desde la caída del Presidente Houphouët Boigny (figura del país que no duda tampoco en criticar, erosionando la imagen de Padre de la Nación que se cuidó de dejar) caos político, segregación racial, desorden público, decadencia económica, crisis de esperanza. Este compromiso abnegado le ha valido numerosos problemas y amenazas físicas, por no decir intentos de asesinato. Cuando se le quemaron su casa, decidió exiliarse.
Dio su vida al reggae y el reggae se le salvo su vida en más de una ocasión… Por ejemplo, cuando el General Robert Gueï decidió ir a por él. Gueï que logró hacer caer la dictadura de Konan Bedié y que se había comprometido a “limpiar la casa” cayó finalmente en las manos de las multinacionales mafiosas y acabó dando la espalda a su pueblo. En su canción Le Balayeur (“El barrendero barrido”), Tiken cuenta las esperanzas que había depositado en este político que acabó repitiendo los mismos errores que sus precededores. El reggae lo salvó porque su música había creado lazos de amistad y de respeto que las manigancias maquiavelicas no pudieron erosionar. Cuando el Presidente decidió hacerle callar, Tiken recibía entonces en su casa, a muchos militares cercanos a la guardia presidencial entusiastas de su reggae, que se habían convertidos en amigos del artista. Son ellos quienes le aconsejaron varias veces no dormir en casa cuando sabían que emisarios le esperaban para pegarle, atraparle o matarle. Fueron ellos quienes le aconsejaron de salir del país para protegerle. Tanta suerte no tuvo su amigo, el comediante Camara H, asesinado en 2003 y cuya muerte nunca ha sido aclarada. Muchos amigos cercanos y familiares cayeron entonces.
La religión es otra de las plagas actuales de África que quiere desmitificar. De religión islámica, TJF rehuye de la manipulación de las religiones para dividir. En la canción Allah, sueña con una religión pacífica y de convivencia. Recuerda en sus entrevistas que las religiones monoteístas fueron una importación de la colonización que no puede impedir la coexistencia que siempre ha marcado la historia de los pueblos africanos. En la canción Le Pays Va Mal (“El país está mal”), explica: “Antes no había ni cristiano ni musulmán Pero ahora todo está jodido. Los estudiantes están divididos Los militares están divididos Los profesores están divididos, Hasta las madres en los mercados están divididos…”
Tiken Jah Fakoly nos ofrece una crónica acertada de la situación africana a través de una música reivindicativa y festiva. Sus bases de reggae, dub, soukouss, unen Jamaica con África y aciertan en un mensaje universal. Nos acerca a la realidad de un continente castigado y acorralado por las grandes multinacionales que perpetran otro modelo de esclavitud ahora económica. En Y’en A Marre (“Estamos Hartos”), canta: “Tras la abolición de la esclavitud, Han creado la colonización Cuando hemos encontrado la solución, Han creado la Cooperación, Pero como denunciamos la situación, Han inventado la globalización, Y sin entrar en explicar la globalización, Es Babilonia que nos explota”.
Tiken Jah Fakoly no es su verdadero nombre. Si FakolY es un homenaje a su antepasado Manding, y Jah, un apodo que le pusieron de niño porque siempre pedía que le tradujeran las letras de Bob Marley, Tiken es la deformación del apodo “Tieni” en el idioma Manding que significa “agitado” y que le había dado su padre por las razones que todos imaginamos.
En su séptimo disco Coup de Gueule (“Grito”), colaboran Magyd Cherfi (ex-cantante de ZEBDA) quien participa a la escritura de Tonton d’Amérique (Tío de América), Mouss y Hakim (ex-cantantes de Zebda) quienes participan a la canción Où Tu Veux Que J’aille (dedicado al actual presidente Laurent MGbagbo quien estampilló TJF como “persona non-grata” en su propio país), Didier Awadi (Padre de los padres del hip-hop senegalés) y Positive Black Soul. Los músicos que participaron en sus precedentes discos siguen presentes, y en particular la magia percusionista del trío Dunbar, Shakespeare y Cheng y los teclados reggae de Tyrone Downie.
TIKEN JAH FAKOLY nos contagia su combate y nos enseña la historia de su pueblo, muy a menudo ignorada por Europa y América cuyos gobiernos cual que sea su color político y su afán “social” no han dudado sin embargo en dirigir desde hace más de un siglo y medio el destino de varios centenares de millones de personas para controlar la riqueza de su suelo, favoreciendo la corrupción, el hambre, la tortura, la dictadura, la discriminación, la explotación, las violaciones, la privación de libertades fundamentales, la negación de su cultura ancestral, la manipulación y el enrolamiento de sus juventudes,… Y sino que pregunten en África por la herencia de un llamado socialista François Mitterrand y por el papel de su hijo.
“Podemos perdonar, pero no vamos a olvidar” TJF
TJF nos pregunta como uno puede saber a dónde ir, si no sabe de dónde procede. Sus textos no proponen soluciones sino buenas preguntas. La solución está en las manos de las juventudes africanas y si se lo proponen, pueden lograr la paz y la armonía. Si se levanta la juventud africana, pueden lograr cosas muy importantes vaticina en la última canción de su último disco TIKEN JAH FAKOLI, como señal de esperanza; “Ça va faire mal” (“Va a ser fuerte”).